Carlos Romero Deschamps: una vida excéntrica con lujos, casas y yates
Carlos Romero Deschamps, ahora exlíder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) que presentó su renuncia, no era un hombre de gustos simples, entre sus excentricidades se cuentan lujos, departamentos, autos y relojes valuados en millones de dólares.
¿De qué se le acusa?
Del desvío de 500 millones de pesos para una campaña presidencial de Francisco Labastida en el 2000. También fue demandado penalmente por presuntos desvíos del sindicato petrolero, mientras que como senador en dos periodos y diputado federal en tres, destacó por su improductividad y ausencias.
Deschamps se convirtió en el secretario general del STPRM en 1993, después de que Joaquín Hernández Galicia, «la Quina» fuera detenido y encarcelado, desfalco que fue llamado «Pemexgate«. En 2003, Romero Deschamps fue acusado y llevado a proceso penal por supuestamente haber entregado mil 500 millones de pesos del sindicato al PRI, sin embargo, años después un juez dio por expirado el delito porque la PGR nunca aportó pruebas contra el dirigente.
Lujos
Se sabe que gusta de comprar relojes de la marca Aude Piquet, valuados hasta en 7 millones de pesos, que tiene un departamento en Cancún de 18.7 millones de pesos, propiedades en The Bath Club en Miami de más 110.8 millones y compró tres yates con distintos valores que suman los 58.4 millones.
En 2013, Deschamps le regaló un Ferrari Enzo edición limitada a su hijo José Carlos, para obtenerlo, el comprador debe demostrar que tiene solvencia económica, contar por lo menos con dos autos del mismo tipo, que el país donde se utilice el auto tenga una agencia de esa marca y pasar una prueba de manejo.
En un video en redes sociales, se ve a José Carlos pasear en un Ferrari dorado por Mónaco. El Ferrari 458 Spider cuesta alrededor de 26 millones de pesos, además de un Lamborghini Aventador con un valor de 6.5 millones de pesos.
¿Qué sucedió? Esta mañana en su conferencia, el presidente Andrés Manuel López Obradorconfirmó que Deschamps renunció a Pemex “por voluntad propia” y en exhorto del Gobierno de México.