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Los 10 gobernadores que integran la Alianza Federalista lanzaron un ultimátum al presidente Andrés Manuel López Obrador, advirtieron que de no atender a su petición de diálogo para revisar los recortes al presupuesto para 2021, podrían optar por la ruta para salir del Pacto Federal. Inmediatamente AMLO les respondió señaló que para salirse deben hacer una reforma a la Constitución y los reto a someter a encuesta la determinación de romper o no con la Federación.

“Nuestros posicionamientos son para establecer un diálogo que nos permita construir acuerdos con el Gobierno de la República, pero también para mandar el mensaje contundente de que no estamos dispuestos a tolerar más abusos de su parte. Como Estados libres y soberanos defenderemos nuestra dignidad ante el demérito, ataque y confiscación de lo que nos pertenece… Es necesario establecer un diálogo efectivo y una empatía real. De no establecer puentes firmes y de respeto entre el Gobierno Central y los Estados y Municipios, se pondrá en riesgo la consistencia y razón de ser de nuestro Pacto Federal”, subrayaron los 10 gobernadores que integran la Alianza Federalista en un comunicado.

Además, pidieron replantear el Sistema Nacional de Coordinación Fiscal; reconsiderar la extinción de los 109 fideicomisos y ponderar un cambio de ruta en la estrategia federal contra la pandemia por COVID-19. En este sentido, y ante la negativa de AMLO de reunirse con ellos, algunos gobernadores han planteado someter a consulta el pacto fiscal, ¿se puede hacer?

Es como un acuerdo de igualdad, mediante el cual se les otorga soberanía a los estados, pero a su vez, reconocen al Gobierno Federal como su representante, y se encuentra previsto en el Artículo 40 de la Constitución Política.

“Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica y federal, compuesta por Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, y por la Ciudad de México, unidos en una Federación establecida según los principios de esta ley fundamental”, se establece.

De acuerdo con el investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Carlos Ruiz Moreno, en entrevista con Canal 44, señala que el pacto federal es “un acuerdo de voluntades entre los primitivos representantes de lo que fueron las provincias en las que se dividió la República mexicana en su primera época –siglo XIX-. Esas provincias tomaron la decisión de transformarse en estados y declararse libres, autónomos y soberanos. Cada una de las entidades se dio a la tarea de organizar su constitución y, posteriormente, se da una gran convocatoria del congreso constituyente mexicano y se otorga la primera constitución federal -1824-”.

En términos presupuestales, es en la Ley de Coordinación Fiscal donde se integra desde la Federación un gasto público, incluido en el Presupuesto de Egresos, y que se entrega a los gobiernos estatales y municipales, a través de participación y asignaciones.

Es a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que se celebra un convenio con las entidades que soliciten adherirse al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal que establece esta Ley y participarán en el total de los impuestos federales y en los otros ingresos que señale esta Ley mediante la distribución de los fondos que en la misma se establecen.

Cabe recordar que el llamado pacto fiscal se firmó en el gobierno de José López Portillo, cuando celebró en Guadalajara la Quinta Reunión de la República, en la que hubo una discusión hacendaria nacional con el propósito de definir cómo sería la recaudación de los impuestos, tasas y derechos en los niveles municipal y estatal.

De esta manera, se acordó integrar un gasto público federal y después hacer un repartimiento de los recursos que integran el gasto público para las entidades y municipios. Ese reparto establece que alrededor del 80% de lo recaudado sería para integrar el gasto público federal y el 20% restante se repartiría a las entidades federativas y a los municipios.

En síntesis, el pacto fiscal sirve para tener una recolección eficiente deimpuestos, pero no exime que los estados y municipios que lo hagan; sin embargo, ha sida cuestionada la forma de distribución, pues al momento de repartir el dinero se da más a los estados más pobres para programas sociales; pero a los estados que más aportan son a los que menos participaciones federales se otorgan pues se considera que son económicamente autosuficientes.

Romper el pacto ¿fiscal o federal?

Ante la propuesta de los gobernadores de la Alianza Federalista se ha analizado el tipo de rompimiento que habría si solo en el ámbito fiscal o en el federal, lo que algunos han calificado que tiene tinte separatista.

En una columna titulada Romper el pacto ¿fiscal o federal?, el jurista e integrante del Consejo de la Judicatura Federal, Bernardo Bátiz, hace un análisis y refiere que se trataría más de una salida del pacto fiscal: “Se trata quizá solo de una ocurrencia, de la separación del pacto fiscal se han atrevido a insinuar el rompimiento, del pacto federal es algo imposible, intentarlo sería inaceptable y una verdadera traición a la patria; el pueblo de México, que ha demostrado decisión política y está informado, que cuenta con autoridades electas y comprometidas con sus intereses, no lo permitiría nunca”.

¿Se puede salir del pacto fiscal?

El artículo 10 de la Ley de Coordinación Fiscal establece el mecanismo por el cual los Estados pueden adherirse al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal. Asimismo, cómo pueden dar por terminado el Convenio de Adhesión, lo cual puede realizarse por medio de la legislatura local, quien deberá autorizar al gobierno estatal la decisión de terminar el convenio y publicarlo en el Periódico Oficial del Estado.

Para esto, los gobernadores necesitan el apoyo de los Congresos locales. Actualmente, la mayoría de ellos en poder de Morena, partido del presidente López Obrador.