Amenazada la continuidad de la coalición “Por Michoacán al Frente”.
La amenaza de ruptura total se asoma en la Coalición “Por Michoacán al Frente”, debido a la polarización interna que se ha gestado en los recientes días, donde el péndulo Uruapan se ha colocado como una pieza del disenso político entre los partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional, al grado de condicionarse los procedimientos aliancistas de cara a los comicios del próximo primero de julio.
El actual dirigente del PRD, Martín García Avilés, quien desde que asumió el liderazgo en Michoacán, ha empujado a un precipicio político la continuidad de la coalición en el estado. Sin embargo, cabe recordar, que el ahora pre candidato al senado de la República, Carlos Torres Piña, colocó en un óptimo y rentable escenario político a la coalición, cuando aún dirigía los destinos del perredismo michoacano.
Y ante este escenario, se asoman conjeturas y deducciones políticas, donde en un contexto de ruptura política en la coalición, el más beneficiado sería el propio Antonio García Conejo, que, de forma consecuencial acompañaría a Torres Piña en la formula, al no haber la coalición partidaria. No obstante, y a pesar de los esfuerzos de la actual dirigencia por conflictuar la coalición, hasta el día de ayer, la dirigencia del PAN confirmaría solo lo de Uruapan con candidata propia en la persona de Mary Doddoli Murguía.
Municipios como Zamora, La Piedad, Sahuayo y Morelia, bastiones políticos del panismo en Michoacán, se encontraría en una situación similar a la de Uruapan, pues, al no haber consenso en un municipio, como efecto dominó se caería la coalición tanto en municipios como formulas a las diputaciones locales.
Asimismo, García Avilés además de condicionar Uruapan para el PRD y de amagar con no acompañar al PAN en municipios estratégicos para el panismo; ahora, solo le resta esperar el resultado de quién será el candidato al senado de la república en Michoacán, y así, definir la continuidad de la coalición o en su caso, la ruptura política que solo tendría como beneficiario al hermano del gobernador, Silvano Aureoles.