AMLO va a tierras violentas del Mencho y Marro: Zapopan e Irapuato
El presidente Andrés Manuel López Obrador retoma sus giras por la república luego de su visita a Estados Unidos para encontrarse con Donald Trump. Este nuevo recorrido que emprenderá contempla tres entidades: Guanajuato, Jalisco y Colima, que en su conjunto concentran cerca del 22% de los homicidios dolosos en el país y que en los últimos meses han registrado diversos hechos violentos principalmente por la lucha entre dos grupos del crimen organizado que se disputan el territorio: Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cártel Santa Rosa de Lima, liderados por Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, y José Antonio Yépez, el Marro. Además en un contexto de diferencias, tensiones y desencuentros con dos gobernadores: Diego Sinhue Rodríguez y Enrique Alfaro.
Homicidios y ataques, las marcas del Mencho y Marro
En la víspera de la gira de López Obrador a Jalisco y Guanajuato, ambas entidades se han visto inmersas en enfrentamientos, ataques y repunte en homicidios dolosos, en el marco de lo que se identificó la disputa entre dos grupos delictivos liderados por Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, y José Antonio Yépez, el Marro.
El centro de operaciones del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cártel Santa Rosa de Lima se centra entre Jalisco y Guanajuato. Sin embargo, hay una entidad cuya incidencia delictiva aumentó en los últimos años: Colima, pues debido a su ubicación al limitar con Jalisco, Michoacán y con el océano Pacífico, se convirtió en el primer filtro para el trasiego de drogas sintéticas, pues en Manzanillo, se encuentra uno de los puertos más importantes del país.
El ataque en un anexo en Irapuato, el auto con explosivos cerca de la refinería de Salamanca, el hallazgo de restos humanos en fosas en Tlaquepaque y Zapopan, así como el asesinato del juez federal Uriel Villegas y su esposa en Colima, son los últimos hechos violentos que han cimbrado las tres entidades y que se vinculan al crimen organizado.
Irapuato, municipio gobernado por el panista Ricardo Ortiz, robó la atención del segundo mensaje de López Obrador por su victoria en las elecciones, pues el 1 de julio la masacre en un centro de rehabilitación con saldo de 28 personas fallecidas, dejó al descubierto lo que se clasificó como “anexos clandestinos” son el blanco de las disputas entre cárteles.
Previo a la masacre en Irapuato, ya se habían reportado otros sucesos similares a finales de 2019 y en lo que va del año donde grupos armados incendiaron y se llevaron gente de centros de rehabilitación no regulados por las autoridades.
Por el municipio gobernado por la morenista Beatriz Hernández Cruz pasan los ductos de Pemex y se reforzó la seguridad luego de los señalamientos hechos por el Marro contra el presidente López Obrador cuando inició la estrategia contra el robo de combustible.
Recientemente en Zapopan y Tlaquepaque, municipios gobernados por alcaldes de Movimiento Ciudadano, la Fiscalía General de Jalisco informó del hallazgo de al menos 75 bolsas con restos humanos en fosas clandestinas, encontradas entre el 12 y 13 de junio.
Además, el pasado 17 de junio también se encontraron unos 14 cuerpos que estaban en la superficie de una finca en Lagos de Moreno, en los límites con el estado de Guanajuato.
De acuerdo con la fiscala especial de desaparecidos de Jalisco, Blanca Jaqueline Trujillo, en los últimos seis meses han encontrado alrededor de 215 cuerpos enterrados en fosas de Zapopan, Chapala, Tlajomulco y Juanacatlán.
El juzgador tenía a su cargo algunos casos ligados al cártel que encabeza Nemesio Oseguera, el Mencho. En 2019, la alcaldesa de Manzanillo Griselda Martínez, que llegó con Morena a gobernar el municipio sufrió un atentado, de la cual salió ilesa. En su momento refirió que dicha acción se dio bajo un “contexto político y muchos intereses económicos”, aunque evitó precisar si sospecha de algún grupo o particular.
Los hechos relatados, sucedidos en los municipios de distintas entidades, son los que justamente visitará López Obrador y donde se reunirá con los gobernadores, en medio de las diferencias y tensiones por el clima de inseguridad que se vive y las disputas políticas que han llevado a que estas tres entidades sean un foco rojo y la prioridad para la actual administración.
La visita además llama la atención porque si bien es sabido de las diferencias públicas entre los titulares del Ejecutivo Federal y estatal, destaca la ausencia de Alfonso Durazo, secretario de Seguridad Pública y que, según intercepciones que se hicieron, era uno de los objetivos para un posible atentado, el cual finalmente se perpetró contra Omar García Harfuch, secretario de Seguridad de Ciudad de México, en medio de la disputa entre dos de los cárteles que sumergen a tres entidades en la inseguridad.
