Hartzazgo social por plantones y tomas de maestros y normalistas
Aunque hay líderes que han vivido del sistema, como Juan Manuel Macedo Negrete, que advierten “no provoquen al magisterio”, la realidad es que las manifestaciones de maestros y normalistas están llevando al hartazgo social y la sociedad aplaudiría, sí, aplaudiría que el gobierno asumiera su papel y los desalojara.
Ya basta de tanta tolerancia a un grupo que se ha dedicado a chantajear al gobierno y para que satisfagan sus absurdas peticiones recurren a plantones y bloqueos que afectan la vida cotidiana, en este caso, de los morelianos, aunque dañan a Michoacán cuando se plantan en las vías férreas.
Un tal Benjamín Hernández Gutiérrez, dirigente de Poder de Base, se atreve a decir que les tienen que dar plazas a los egresados de las normales del 2019 hasta los del 2022. Vaya cosa tan absurda y nefasta para la calidad educativa en Michoacán.
No he visto a egresados de medicina, de odontología, de leyes, de veterinaria, de biología y de otras profesiones bloquear las calles para que, ahuevo, les den una plaza; tienen que demostrar su capacidad para acceder al mercado laboral.
Y, sin embargo, los normalistas, sin que demuestren su capacidad, ahuevo quieren una plaza y, seguro estoy, aquellos profesionistas serían mejores docentes que los egresados de los normales y de estos, muchos, pagaron para estar ahí, para asegurar su plaza sin tener los conocimientos ni el perfil para pararse frente a grupo.
La productividad laboral mide la eficiencia en el trabajo, la capacidad de las personas en convertir lo que hacen en productos útiles. Trasladando eso al sector educativo michoacano, queda claro que los maestros incumplen con ese precepto porque su trabajo es deficiente y, en consecuencia, el producto es malo y, por desgracia, ese producto son los niños que pagan, con una pésima enseñanza, la ineptitud de los profesores -no todos- que se la pasan más en plantones y bloqueos que en prepararse para mejorar la calidad educativa de la niñez michoacana.
Y ese rumbo llevan los normalistas; serán parásitos sociales como la mayoría de los maestros que nutren a la CNTE, a Poder de Base –o Joder de Base- como se les conoce, y, lamentablemente, la calidad educativa en Michoacán seguirá en declive por culpa de esa bola de zánganos y nefastos sujetos que se dicen maestros.
En manos de los parásitos sociales llamados normalistas está el mejorar la calidad educativa en Michoacán y, por lo que se les ve, no será en el corto plazo, será hasta que los padres de familia, la sociedad les ponga un alto.
Y sí, en respuesta a Juan Manuel Macedo Negrete, no provoquen a la sociedad porque todo tiene un límite y los maestros y normalistas ya están llegando al umbral, en cualquier momento puede surgir el ¡ya basta!, que les ponga un alto.
Los habitantes de Tenencia Morelos y de los alrededores de Xangari, las personas que afectaron cuando tomaron el SAT, ya les dieron un aviso de lo que puede ocurrir, “ya nos tienen hasta la madre” les dijeron en su cara.
Y, sí, por ese hartazgo, por esa impunidad con la que se maneja la CNTE y los normalistas, la sociedad aplaudiría que se les desalojara.