EducaciónMichoacánNoticias

Rectora de la UMSNH responde a acusación y defiende el esquema de jubilaciones

Rectora de la UMSNH responde a acusación y defiende el esquema de jubilaciones

Rosarioi Hernández

Morelia, Mich.- En medio de los señalamientos y denuncias del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana (SPUM), la rectora Yarabí Ávila González salió al paso de las acusaciones y rechazó que haya fundamento para los amparos interpuestos en contra del nuevo esquema de jubilaciones y pensiones. En tono conciliador, Ávila González afirmó que la administración nicolaita no era la responsable del inicio de lo que algunos han calificado como una “guerra legal” y subrayó que

“La guerra no la empezamos nosotros, la guerra no se empezó en la administración central ni en la comunidad universitaria. En la Universidad Michoacana no debe haber guerras ni batallas. Todos somos parte de un mismo equipo”, aseguró la rectora durante una conferencia de prensa. Con esta declaración, Ávila González buscó disipar cualquier percepción de conflicto interno y enfatizó la importancia de la colaboración para el crecimiento de la institución y la protección d

En relación con los amparos planteados por los docentes, la rectora destacó que no existe base legal para los mismos, ya que aún no se han presentado afectaciones por el nuevo esquema de jubilaciones. Además, detalló que los docentes se jubilan con base en su último salario percibido, dependiendo de la categoría que ocupan, lo que, en algunos casos, puede resultar en montos elevados.

Ávila González también subrayó que una vez que los docentes se jubilan, mantengan todas las prestaciones que tenían en su condición de activos, ya que estos beneficios se consideran “derechos adquiridos”. La rectora defendió que este esquema asegura una protección a los trabajadores, lo que ha generado un alto nivel de percepción económica en los jubilados, pero aclaró que cada caso debe ser abordado conforme a lo establecido en el Contrato Colectivo.

EN OPINIÓN

La postura de la rectora, aludiendo a la necesidad de unidad, también tiene un trasfondo político, ya que busca evitar que las disputas internas entre la administración y los sindicatos afecten la imagen pública de la universidad y, por ende, su posicionamiento ante la sociedad michoacana y el gobierno estatal. La crítica al concepto de «guerra» y su llamado a la colaboración refleja un esfuerzo por minimizar la polarización que podría socavar.

El tema de las jubilaciones ha sido un punto de fricción no solo entre los docentes y la administración, sino también en el ámbito político local, dado que cualquier ajuste a los esquemas laborales en la educación superior puede ser interpretado como un reflejo de las políticas del gobierno estatal hacia la educación pública. Así, la rectora se enfrenta a un doble reto: equilibrar las demandas de los sindicatos con las expectativas del gobierno y mantener la paz social dentro de

Aunque Ávila González ha insistido en que los amparos no tienen sustento legal por las “nuevas afectaciones”, la administración universitaria debe ser cuidadosa, pues el tema de las pensiones es sensible y tiene un fuerte componente de derechos adquiridos que podría complicar aún más las negociaciones. Esto podría traducirse en un clima de tensión prolongada, no solo en el ámbito académico, sino también en el político, especialmente si la situación se tr

En este sentido, la rectora ha tomado una postura defensiva, pero también estratégica, al buscar desactivar la posible conflictividad, mientras sigue impulsando el cumplimiento de los lineamientos legales y laborales. La próxima respuesta de los sindicatos y la reacción de los actores políticos, especialmente del gobierno estatal, marcarán el rumbo que tome este conflicto, que no solo involucra a la comunidad universitaria, sino también a los actores políticos que podrían verse involucrados en la gestión.